Le invitamos a adentrarse en este Parque Arqueológico y conocer de primera mano un fragmento más de la historia de la ciudad. Situado en el borde occidental del Teso de las Catedrales, amplio cerro sobre el que se desarrolló la ciudad de Salamanca a partir de la Segunda Edad del Hierro (ss V al I a. C.), este espacio conserva restos arqueológicos de gran valor histórico, del convento de San Agustín y su iglesia de San Pedro, el Colegio de Cuenca y de su entorno urbano.
Convento de San Agustín
Los restos visibles del Convento de San Agustín, al Sur de la calle de San Pedro, además de su gran valor estético, son de gran valor arqueológico. El convento fue un importante centro de saber, donde habitaron y desarrollaron su actividad figuras tan destacadas de la cristiandad como la de Fray Luis de León o Santo Tomás de Villanueva.
La fundación de la Orden Agustina en Salamanca tiene lugar en la Edad Media. Los agustinos se establecen en el barrio de la judería donde poco a poco van acumulando propiedades, cediéndoles el obispo en 1377 la parroquia de San Pedro. Esta antigua iglesia románica será el germen sobre el que se levante el convento que llegó hasta el siglo XIX, y cuya construcción fue iniciada por Juan de Álava en 1516. Los restos hoy visibles se corresponden con el sector nororiental del convento, apenas una cuarta parte de los 10.000 m2 que ocuparía.
Colegio Mayor de Cuenca
Situado al Norte de la Calle de San Pedro, su claustro o su fachada principal debieron tener también un gran valor estético, constituyendo un importante centro de saber vinculado a la Universidad de Salamanca. Su construcción se inició en el siglo XVI, bajo la dirección de Juan de Álava, aunque las obras se prolongaron hasta el XVIII. Fue uno de los edificios más notables de la ciudad. Su fundador, Diego Ramírez de Villaescusa, era obispo de Cuenca y antiguo estudiante de la Universidad de Salamanca. Durante la Guerra de Independencia, bajo la ocupación francesa, el antiguo Colegio fue utilizado como cuartel y en 1812 fue demolido por motivos estratégicos y para reutilizar su piedra en otras construcciones defensivas de la ciudad.
Calle de San Pedro o de Cuenca
Ambos edificios estaban separados por la Calle de San Pedro o de Cuenca, cuyos restos empedrados se pueden contemplar en la visita. Fue una de las arterias principales de la ciudad durante la Edad Media y en torno a ella se distribuía el populoso barrio de la Judería, que daba nombre a la calle en ese periodo. Tras la desaparición de la Judería la calle pasó a llamarse de San Pedro y posteriormente de Cuenca.
Puedes realizar una visita guiada a este espacio a través de los programas organizados por Turismo de Salamanca ( https://www.salamancaymas.com/) o contratar una visita a la carta personalizada (Diese E-Mail-Adresse ist vor Spambots geschützt! Zur Anzeige muss JavaScript eingeschaltet sein!)
La visita al parque arqueológico del Botánico permite, a través de unas gafas 3D con un visor de realidad virtual, reproducir imágenes creadas por ordenador para visualizar "lo que existió" y "lo que existe". Gracias a la recreación digital, los edificios de este espacio destruidos en la Guerra de la Independencia se ‘recuperarán’.